Uno de los torneos más longevos del fútbol nacional está a punto de regresar tras dos años sin poder celebrarse debido a la crisis sanitaria.
Fue en el año 2009 cuando la organización del torneo dio el salto de apostar por el fútbol femenino. Comenzó con un número de equipos reducidos (Las Rozas, Tres Cantos, Pauldarrak…), principalmente clubes históricos de cantera del fútbol femenino.
Sin embargo, con el paso del tiempo y poco a poco, estructuras profesionales se fueron sumando: “Nos dimos cuenta que estaba creciendo muchísimo y decidimos apostar por ello. Agradecer a los clubes profesionales que nos respaldaron” relata Xabi Pérez, periodista de la organización del torneo.
El hecho de añadir categorías ha permitido la presencia de estos equipos que son un aliciente para los equipos modestos que tienen la oportunidad de enfrentarse a las estructuras más potentes: “Es momento de agradecer a los equipos modestos que llevan muchos años trabajando en su fútbol base” expone Xabi Pérez, que se muestra muy satisfecho con la labor que realizan.
Varias jugadoras de Liga Iberdrola pasaron por el Costa Daurada CUP
La nómina de jugadoras que ha desfilado por el torneo es muy amplia. Si nos ponemos a investigar enseguida nos asaltan los primeros nombres que a día de hoy comienzan a despuntar en el profesionalismo.
Emma Ramírez (Real Sociedad) jugó el torneo con el RCD Espanyol,
Sonia García, actualmente en el Deportivo Alavés, lo disputó con el Atlético de Madrid.
Otro de los equipos que más jugadoras ha aportado ha sido el Eibar ya que
Amaia Peña, su actual guardameta cedida por el
Athletic, disputó el campeonato cuando militaba en el Pauldarrak, antes de su paso por USA. Además, Marta López y Malen Olañeta que ya han debutado con el primer equipo en Liga Iberdrola, lo jugaron con el conjunto armero.
Ariana Arias, actualmente en el Real Madrid “B” y
María Portolés, en el Madrid CFF “B”, defendieron la elástica del Tacón en tierras catalanas.
Otra de las anécdotas más relevantes fue la presencia de
Amanda Sampedro en la edición de 2015 que nada más regresar del Mundial de Canadá con España, cogió un coche junto a su padre para dirigir al equipo Alevín del Atlético de Madrid: “Lo de Amanda fue una pasada. Se bajó del avión de jugar un mundial, y llegó a tiempo para hacerse cargo de su equipo en el torneo. Aquello generó mucho impacto, sobre todo para los equipos extranjeros” comenta un ilusionado Xabi Pérez.
La pandemia y el freno a la expansión
Pero la pandemia frenó en seco la evolución de un torneo, que se ha basado en otros internacionales de gran prestigio como los Pitea Summer Games o la Gothia Cup.
Hasta 70 equipos femeninos llegaron a disputar las ediciones del 2019. Sin embargo, el objetivo ahora es más cauteloso y se trata de ir recuperando el volumen de equipo: “Hay que ver como volvemos de la pandemia pero la imagen del Torneo es la que es y la gente lo agradece y están volviendo” detalla Xabi Pérez.
Uno de los objetivos que se marcan desde la organización para poder es conseguir la paridad de cara a la edición de 2025, para este 2022 la meta es algo más cautelosa: “El objetivo es regresar poco a poco a las cifras anteriores y para este 2022 nuestro reto es poder tener 32 equipos” finaliza Pérez.
Una
Costa Daurada CUP que regresa con la firme intención de seguir haciendo historia dentro del fútbol femenino en nuestro país.