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La evolución del FC Levante Las Planas en los últimos 10 años ha tenido ciclos de todos los colores. Anteriormente a la dulce etapa de la actualidad, 2015 fue la última gran temporada del club de Sant Joan Despí. El club catalán campeonó en el grupo III de Primera Nacional y disputó el play-off de ascenso a Primera División. El UDG Tenerife – equipo que lograría el ascenso aquel año - condenó al Levante a la eliminación en semifinales.
Tras aquel curso, el Levante entró en una vorágine de descensos, ascensos, crisis y gloria sin fin. Descendió a categoría regional en 2018 (Preferente) y desde entonces tan solo es conocedor de la más absoluta victoria, hasta encadenar tres ascensos en cuatro años y tocar el cielo de la Primera División, 9 años después de su última etapa en la élite.
Desde el año 2016, Sebastián Cañas es el presidente del club y ha logrado reflotar la nave del Levante Las Planas. Junto al máximo responsable conocemos la trayectoria deportiva e institucional de un recién llegado a Primera División, el club más modesto de la nueva LFPP.
Presidente, enhorabuena por el ascenso. Un hito histórico en el club. Pero, si echamos la vista atrás, encontramos una encrucijada importante en los últimos años.
Pues sí. Llevo seis años en la presidencia y no ha sido siempre una etapa buena como lo es ahora. En 2017 tuvimos una falta de confianza por parte del entrenador, junto a un equipo muy competitivo, pero se acabó bajando en 2018. Además de una deuda que esta Junta no había generado y no se pudo ser competitivo económicamente. Cuando llegamos al club, desconocíamos si había deuda pero sí se hizo un plan de viabilidad económico y deportivo. Tras el descenso a Preferente empezamos a mover hilos y se incorporó a Ferran Cabello (2018).
La parte económica ha sido la que ha marcado la diferencia para llegar a esta situación de bonanza deportiva?
Evidentemente, la economia es lo que te hace ser más o menos competitivo. De todas formas, siempre hemos tenido mucha prudencia a la hora de equilibrar el presupuesto. La Junta y la dirección deportiva ha acertado en las incorporaciones, con un coste inferior al de otros clubs y aspiraciones. Para hacernos una idea, Osasuna, Espanyol o Deportivo son tres ejemplos de clubs que están por encima nuestro económicamente. Nosotros éramos el octavo presupuesto y hemos logrado el ascenso de categoría.
¿De qué presupuesto estamos hablando?
En Reto Iberdrola estábamos alrededor de los 450.000€ y esta temporada estamos aún ajustándolo. Esta temporada en Primera División estaremos en 800.000€, aunque no llegamos a esta cifra. Somos el club que somos, de un barrio de Sant Joan Despí. Aunque el club estuvo en Primera División hace 10 años, mediáticamente la situación no tiene nada que ver con la actual y el 'boom' en el fútbol femenino ha sido espectacular.
Y con una plantilla con notable jugadoras locales, catalanas.
Desde hace tres temporadas se está notando el crecimiento en el fútbol base. Estamos incorporando jugadoras que vienen de Igualada, de Vilanova, de Sitges...tenemos una estructura consolidada y buenas categorías.
La pasada temporada no tenían patrocinador en Reto.
Estamos en contacto con patrocinadores. Imagínate ser el octavo presupuesto de la categoría y no tener patrocinadores...El esfuerzo que hemos hecho en todos los sentidos ha sido muy grande. La aportación económica a jugadoras y fichas ha ido muy ajustado. El mérito ha sido muy grande.
¿Cuál era entonces la fuente de ingresos?
La RFEF nos da la subvención de 100.000€. Teníamos que haber recibido la ayuda en cinco plazos y finalmente se ha abonado en el último mes de competición. Esto ha sido una dificultad añadido porque hemos llegado justos. También tenemos la subvención del Ayuntamiento y las cuotas de los jugadores y jugadoras del fútbol base. La RFEF obliga a tener ocho jugadoras profesionales, con su contrato y sus responsabilidades fiscales.
Este año se debuta en Primera División, con sus obligaciones y requisitos. La instalación es una de ellas y esta temporada jugaréis en Sant Joan Despí, planteándose la opción de Gavà.
El CEO de la LFPP visitó nuestras instalaciones y vieron que el Municipal de Las Planas no cumple con muchos de los requisitos que se quieren poner en marcha. La liga tenía buenas referencias de los campos próximos y visitó Gavá, vieron que no había color y nos dijo que se tenía que jugar allí. Entonces fue cuando le dijimos que nos enviaran un redactado con los puntos que teníamos que cumplir. Con Gavá no hubo ningún acuerdo firmado y finalmente la LFPP accedió a dejarnos jugar esta temporada en nuestra instalación, con algunos cambios que haremos. Hablamos con Gavá y les comunicamos que finalmente jugaremos en Sant Joan Despí.
¿Y la próxima temporada?
El año que viene, sea en Primera División o en Segunda, posiblemente tengamos que jugar en césped natural. Previsiblemente, las dos primeras divisiones exigirán césped natural o híbrido. Es un requisito necesario y se estudiará de qué manera se puede resolver. Nuestro objetivo es mantener la categoría y lucharemos por ello.
Históricamente, las referencias en Cataluña siempre han sido Barça y Espanyol. Esta temporada será Barça y Levante.
Más allá de que la gente se tenga que acostumbrar, ciertos organismos con peso específico también deben ser conscientes de ello. El Levante no tiene el brazo logístico que pueda tener Barça o Espanyol. Alguien nos tiene que echar un cable. Y ojalá el año que viene podamos decir que hay tres equipos en Primera División.
¿También se alegra cuando los modestos son los que ascienden? Sea Levante o sea Alhama.
Estamos muy orgullosos de ello. Lo que hemos logrado tiene un valor enorme porque, además, siempre que una jugadora destaca un poco, se ficha. Nosotros tenemos claro que el objetivo es que las jugadoras compitan y se diviertan. No podemos exigir nada más que la permanencia. El club está en proceso de profesionalización en todas sus áreas.
