De todos los factores que pueden
analizar –podemos, si nos permiten la licencia- los medios con respecto al
crecimiento del fútbol femenino, se tiende a dejar de lado el sector que les
incumbe. Que la cobertura mediática ha aumentado en los últimos años es un
hecho. Que lo ha hecho insistiendo en desvelar historias de superación,
conociendo el lado humano de las jugadoras y no el futbolístico, es una
hipótesis que se podría dar como válida. De hecho, como apunta la joven central
del CD Pozoalbense femenino, Silvia Peñalver, «se echa en falta análisis
tácticos, interpretaciones tácticas. Siempre tiene cabida el contenido que dé a
conocer el lado personal de las futbolistas, pero que también aparezca ese
toque profesional y deportivo. Hablamos de un deporte y se echa en falta el análisis
táctico».
Peñalver, a sus 21 años, cuenta
ya con dos temporadas en los campos de Reto Iberdrola, una en la UD Collerense
y la actual en el CD Pozoalbense. Además de futbolista es estudiante, como la
gran mayoría de sus compañeras. Desde hace cuatro años cursa el doble grado en
Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid
(UC3M). Desde hace dos supera obstáculos para poder continuar sus estudios a
distancia. Silvia Peñalver es una periodista en los campos de Reto Iberdrola y,
por su condición, posee una visión crítica muy interesante para analizar el
papel de los medios en la cobertura del fútbol femenino español.
Pregunta. Para comenzar, tienes
una trayectoria muy amplia para tener 21 años. Has pasado por la cantera del
Atlético de Madrid, UD Tres Cantos, UD Collerense y ahora CD Pozoalbense. ¿Qué
te ha llevado a apostar por tu crecimiento en fútbol femenino?
Respuesta. El motivo ha sido el
crecimiento, no solo como profesional, sino como persona. Siempre había querido
tener la oportunidad de vivir fuera de casa, vivir la experiencia, y me surgió
el proyecto del Collerense en Reto Iberdrola. En Madrid era más complicado
jugar en Reto porque actualmente solo hay canteras.
Me surgió la oportunidad de irme
a Mallorca para dar el salto a la Reto Iberdrola, una competición más
profesionalizada, y no podía decir que no.
P. Comenzaste la carrera
universitaria en tu ciudad natal, Madrid. ¿Cuando lo hiciste ya sabías que
querías marcharte de casa en algún momento y probar suerte con el fútbol, o fue
algo que decidiste cuando te surgió la primera oportunidad?
R. Cuando comencé la carrera
todavía estaba en el Atlético de Madrid femenino y si se me había pasado por la
cabeza la idea de irme fuera de casa era por querer hacer un año de Erasmus o
similar. Nunca tuve la idea de hacerlo fuera de Madrid porque tampoco había
opción de hacerlo a distancia, o las facilidades que, coyunturalmente, tengo a
día de hoy, con las clases online, por ejemplo. Me centraba antes en mi carrera
que en poder irme fuera a jugar y dejar de lado los estudios.
P. ¿Pudo cambiar el panorama del
fútbol femenino nacional lo suficiente entre 2018 y 2020 como para cambiarte a
ti la concepción de marcharte fuera de casa por el fútbol?
R. Es cierto que cuando empecé los estudios, en 2018, todavía no estaba creada la liga Reto Iberdrola. Pensaba
solamente en disfrutar del fútbol, en reencontrarme futbolísticamente en
Primera Nacional con la UD Tres Cantos. Lo de dar el paso a Reto Iberdrola fue
un regalo, algo que ni esperaba ni buscaba.
Con respecto a la creación de la
Reto Iberdrola, estábamos hablando de la segunda categoría del fútbol femenino
español, una competición en actual y constante crecimiento. Quieras o no,
cualquier jugadora se sentirá más atraída cuanto más cerca vea la posibilidad
de ser una futbolista profesional. En mi caso, estar en segunda división con 20
años era de agradecer.
P. Compaginas el estudio del
Doble Grado en Periodismo y Comunicación Audiovisual, en la UC3M, y el fútbol. ¿Cómo
lo llevas? ¿Te has replanteado dejar alguno de los dos?
R. Sí que me pude replantear
volver a casa. Tampoco sabía muy bien cómo compaginar la universidad con jugar
en una categoría superior sin seguir en Madrid, y allí no podía jugar en Reto
Iberdrola. Sí que pensé dar un pasito al lado y centrarme en los estudios.
Entonces me surgieron las ofertas y seguí.
Lo que sí es cierto es que nunca
he considerado dejar de lado los estudios porque es a lo que me quiero dedicar,
a practica el periodismo y la comunicación audiovisual. Además, a día de hoy no
creo que pueda vivir solo del fútbol.
P. ¿Qué te aporta el periodismo?
R. Desde siempre me ha gustado
mucho el periodismo, sobre todo el deportivo. Siempre he visto mucho fútbol,
mucho deporte, y he querido ser la reportera que estaba ahí, a pie de campo. En
los tres años que llevo de carrera he descubierto otras ramas que me apasionan,
como la publicidad o la radio. Creo que no me he equivocado de carrera.
A parte, mi amor por el deporte
me ayuda a compaginarlo. Si tengo que hacer algún trabajo voy a orientarlo
hacia el mundo del deporte porque es lo que me gusta.
También siento que estudiarlo me
puede dar otro enfoque a la hora de considerar a los periodistas, o entender de
una manera diferente las entrevistas… Vemos una saturación de imágenes en
portada cuando alguien falla un penalti, o simplemente hay que entender cómo
puede afectar la presión de los medios a las jugadoras. Es el propio caso de
Simone Biles. Me doy cuenta de estos detalles.
P. ¿Considerarías ser periodista
deportiva especializada en fútbol femenino? ¿O no quieres juntar campos?
R. Me gustaría abarcar más. Tratar
el deporte en general o, incluso, otros ámbitos sociales no deportivos.
Obviamente, mi trabajo ideal sería hablar sobre deporte, pero tampoco me
asustan otros ámbitos.
Es verdad que estar dentro te da mucho más conocimiento sobre jugadoras, jugar a fútbol te permite poder interpretarlo tácticamente y existen varios aspectos que te permiten tener una mejor preparación siendo jugadora. Pero la realidad es que tampoco hay grandes medios dedicados a cubrir el fútbol femenino.
P. Caminemos sobre ese tema. La
cobertura de los medios al fútbol femenino ha crecido en los últimos años
R. Claro, es cierto. Me acuerdo
que cuando era una niña apenas había información en medios. Recuerdo el gol de
Vero Boquete que clasificaba a España para la primera Eurocopa. Tengo la
portada del periódico del día siguiente colgada en casa porque era algo
inédito. Ver fútbol femenino, y deporte femenino en general, en las grandes
portadas era complicado.
Peñalver juega el balón en un partido de liga
P. Como jugadora, ¿te sientes cómoda con ese crecimiento? ¿Cómo analizas ese nuevo periodismo deportivo que se está acercando a vosotras?
R. Hay gente que está haciendo
muy buen trabajo y que se interesa de verdad. Es lo más importante, que venga
una periodista, que se interese por ti y que le guste lo que hace. Es algo que
se ve de forma más habitual.
P. ¿Crees que te puedes sentir
más cómoda por estar, en cierto modo, dentro del sector periodístico? En los
vestuarios en los que has estado, ¿has conocido a jugadoras que, quizás, se
incomodaran viendo el mayor seguimiento de los medios?
R. Sí, supongo que la expresión
de cada una depende de lo cómoda que se sienta. Puede que haya compañeras a las
que les cueste más hablar delante del público, o de un micrófono, e igual otras
tienen más labia y se desenvuelven mejor en esas situaciones. Pero sí que es
verdad que, a mí, estudiar Periodismo, me puede dar esa tranquilidad, ese
sosiego para tratar a los medios como jugadora.
P. Con respecto a lo que
comentabas anteriormente sobre fijarte en los detalles de la profesión
periodística, ¿ves algún comportamiento inapropiado o el acercamiento de un
periodismo sensacionalista al fútbol femenino?
R. Es cierto que, al principio,
hace algunos años, lo que diferenciaba al fútbol femenino y al masculino era
principalmente las posibles buenas relaciones entre clubes, aficiones y
compañeras. Ahora podemos ver cómo quizás empieza a cambiar el comportamiento
por el auge de las redes. Quizás antes se veía más unión entre unos clubes y
otros. Entre los aficionados, también. Se generalizó una idea sobre la modestia
y la pureza del fútbol femenino, en comparación al masculino u otras
disciplinas, que se tiene que mantener.
P. ¿Qué crees que debería mejorar el periodismo especializado en fútbol femenino?
R. Que se apostara más por
especialistas en fútbol femenino. Que hubiera más información y, sobre todo,
más interpretación. Echo en falta análisis tácticos, interpretaciones tácticas.
Siempre tiene cabida el contenido que dé a conocer el lado personal de las
futbolistas, pero que también aparezca ese toque profesional y deportivo.
Hablamos de un deporte y se echa en falta el análisis táctico.
P. ¿Y los medios generalistas?
R. También se me vienen a la
cabeza nombres como David Menayo, de MARCA, o Andrea Peláez, de COPE, que para
mí son fantásticos periodistas y los considero referentes. En este caso
trabajan tanto con femenino como con masculino. Son periodistas y tienen que
adaptarse a lo que tengan por delante.
Pero, como decía antes, echo en
falta la figura de más especialistas que puedan dedicarse a analizar desde
otras perspectivas el fútbol femenino.
Creo que la clave es apostar por la sinergia entre el seguimiento de medios generalistas y el análisis de especializados.
P. De un modo más concreto, ¿qué
se echa en falta en Reto Iberdrola? ¿Y en Primera Nacional?
R. Creo que se bifurcan dos caminos. Por un lado, está el trabajo de los propios clubes, sus redes sociales, entrevistas etc. Es su forma de darse a conocer. Te hablo, por ejemplo, del caso del Sporting de Gijón, que se ha creado recientemente perfiles en redes sociales para la sección femenina del club. Suben vídeos, cuestionarios o rutinas de las jugadoras. Este tipo de contenido creo que acercan mucho al espectador y profesionalizan mucho la competición. Los clubes tienen una labor muy importante para visibilizar el trabajo de las jugadoras.
Por otro lado, los medios tienen
que dar un paso al frente. En Nacional es más difícil. En Reto hemos visto un
crecimiento. Pero en ambos casos creo que se debería apostar por aumentar la
cobertura. Empezando por conseguir que se emitan los partidos, que es
importante.